A escasos 10 minutos tocarían suelo urbano. El optimismo se reflejó en el grupo y fue quizá este quien les permitió llegar a la fábrica con dos minutos de anticipación.
Infiltrarse en la fábrica fue más sencillo de lo pensado. Por obvias razones el lugar no contaba con un alto sistema de seguridad. Cualquier hombre o mujer que estuviera dopado con la bebida no tendría motivos para cometer acto de rebeldía alguno.
El interior del bloque tenía un aire sombrío, y la poco iluminación del lugar era un golpe de suerte. Debían bajar a la planta -1 para en los laboratorios cambiar la fórmula 'BlueUp' por la fórmula 'Fix'. La nueva receta sería envasada en la misma lata azul de la maligna. Sería el mismo mal quien distribuyera su propia derrota. Cada persona despertaría de su des-humanización a través de un sorbo inocente e inconsciente.
Descendieron las escaleras que conectaba el piso principal con la planta -1. Cuando el último integrante tocó el último escalón, apareció súbitamente un hombre con camisa azul donde se leía 'Seguridad'. La sorpresa fue mutua, a pesar de la total frialdad del humano.